domingo, 5 de febrero de 2012

La chaqueta metálica Vs. Historia de una Monja

Viendo ayer "Historia de una monja" (HM) me planteé si Kubrick se la habría visto muchas o pocas veces antes de hacer "La chaqueta metálica" (CM). Ambas películas tienen la estructura de "mitad preparación, mitad acción" (1). HM dedica la primera parte a la vida en un convento, CM a la preparación para ser marine. Lo que en esta mitad de CM es ruido y furia de un instructor que acosa a sus reclutas hasta volverles (literalmente) locos, en HM es silencio y recogimiento, un thriller de culpa judeo-cristiana ante las normas impuestas no cumplidas y el planteamiento de que lo que de verdad cuenta es no engañarse a uno mismo (igual o más desequilibrante que el instructor gritón). En el ejército hay que observar las normas con pulcritud porque si las incumples te la cargas; en un convento, la culpa la llevas dentro. Y en ambos casos, lo que se te enseña es disciplina, normas, mucha obediencia y a no pensar.

Pero lo que hace que HM no sea la película que pudo ser "Sonrisas y lágrimas"(2) de no haberse salido Mary Poppins del convento, es que una vez terminada la "instrucción" para ser monja, a la protagonista la mandan al Congo de enfermera a que "haga el bien" de la misma forma que a los marines les enviaban a Vietnam a "combatir el comunismo". Y tanto para la monja como para los marines (y los espectadores de ambas películas) es fácil darse cuenta de que todo lo enseñado antes de la "batalla" (religión y belicosidad) no sólo es inútil en esos entornos; además entorpece y las personas con iniciativa propia sucumben a estas vidas.
Estructuralmente son películas similares, con un subtexto más cercano de lo que parecería, pero quizá sea mi opinión compartida con los dos directores sobre ejécito ("violencia") y religión ("habrá una vida mejor que hay que cultivar en esta") lo que me las hace similares. Y dejo claro que ninguna de estas películas es condescendiente con el entorno ni se ahorra un detalle de la rutina de sus protagonistas.
Eso sí, aunque le sobren 20 minutos, prefiero "Historia de una monja".
Hay muchos motivos, pero el de la foto del rodaje creo que es suficiente.


1: Estructura de casi todas las primeras partes de películas de superheroes (descubren el superpoder y tienen que domarlo/luchan contra el supermalvado que solían tener de vecino o similar)
2: Premio a traducción de película más ñoña de la historia "The sound of music" en inglés ("La novicia rebelde" en México)

1 comentario:

  1. Impresionante. Has conseguido que prefiera ver una película de monjas antes que una de... todo lo demas. Si algún día las veo, te pego.

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