Quién no haya visto esta película, que no vea esta secuencia. Le va a fastidiar la película y no la va a disfrutar más que desde la perpectiva de lo bien dirigida que está. Que se limite a ver la película. Y luego, que vea esta secuencia.
Siempre que la veo me emociono un poco. Es un monumento a los amores perdidos. Esa cosa (junto a los amigos ausentes) por la que siempre brindaba alguien que ya no escribe por aquí.
Tendre que verla. Muy bueno lo del monumento.
ResponderEliminarMe gustaría aclararte que me refiero a los amores perdidos que en realidad no llegamos a tener. Los que pudieron serlo (o no, de ahí que se hayan perdido), no a los que primero lo fueron para más tarde dejar de serlo.
ResponderEliminarSi ves la película lo entenderás. Y hazlo en V.O si no quieres sufrir el síndrome de "Gran Torino".
Jajaja, es lo que me imaginaba... me refiero a todo.
ResponderEliminar(au, algo en algún lugar duele un poquito...)
ResponderEliminar...avisar a los que no hayan visto la peli sabes que no funciona, es más una provocación...
yo también me emociono viendo esta secuencia poco mucho...
ResponderEliminarYa he visto la pelicula y ya te dije lo que pensaba de ella. No dejó de gustarme y esta escena me parece buenísima. Ese ofrecimiento de un punto de inflexión, ese todo o nada... es bueno.
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