De las muchas infecciones intestinales que se pueden tener, la producida por la bacteria Clostridium difficile es especialmente difícil de curar. Es frecuente que esta infección se cronifique, y que no sean efectivos ni los tratamientos antibióticos a largo plazo. La causa principal de su inefectividad es que la flora intestinal de los pacientes está enormemente afectada y en esas circunstancias el C. difficile es muy difícil de erradicar.
Hoy me he leído un artículo en el que proponen la solución: Introducir heces de otras personas sanas en los intestinos gruesos de los pacientes. Gracias a este "trasplante", se recupera la flora intestinal y así, se cura la infección. No se trata de una idea. Habla de la experiencia extraída de aplicar esta técnica en diferentes estudios. El primero de ellos en 1958. Con una curación del 91% de los pacientes.
Sobre el cómo hacerlo hay dependes. Parece ser que da mejores resultados a través de una sonda nasogástrica (más allá del píloro), pero que en general se hace a través de un enema o una colonoscopia. En ocasiones diluida en leche de vaca.
Queda la duda (escasamente comentada) de quién se presta a donar heches. Y la certeza de que España, líder mundial en donaciones de riñón e hígado, será en este tema una superpotencia.
Debatir sobre la fecalidad siempre es hilarante. Yo tengo heces para dar y tomar y tengo el carné de donador de heces anónimo.
ResponderEliminarSabía yo que al primer comentario tendríamos el primer voluntario...
ResponderEliminar¿Dejarán que te niegues a recibir las heces sin conocer de quién proceden?
Yo paso, bastante me cuesta a mi sacarlas como para andar regalándolas!. Sobretodo cuando viajo: sudor y lágrimas.
ResponderEliminarEso sí, mis clientes tienen mierda para dar y tomar, pero tampoco sobra, porque me la acabo comiendo yo toda, por eso estoy currando un viernes a estas horas.
Es probable que ni digan que son heces. Sabiendo como somos de tikismikis, que probabilidad hay de que un cliente que sale desde el punto A a 100km/h y otro que sale desde el punto B a velocidad absurda colisionen en un punto C convirtiendose en mierdaca y que los salpicones de tal hez se conviertan en la 6ª temporada de perdidos?
ResponderEliminarO sea, que el final de perdidos es que todo es una mierda. ¡Lo sabía!
ResponderEliminarPero buena mierda
ResponderEliminarAsumiendo que todo esto sea cierto, podríamos hablar largo y tendido de la mierda, la caca, las heces y cosas varias; pero lo que a mí me ha sorprendido son dos cosas:
ResponderEliminarPrimero que nadie se haya dado cuenta de la segunda cosa que me ha sorprendido. El malvado de mudo, conscientemente, ha incluído una foto de la gloriosa selección española en esta entrada que habla de mierdas. Es un provocador que reniega de los triunfos merecidos de los deportistas españoles (pregúntenle sobre lo que piensa de Nadal y Fernando Alonso) lo que cual no deja de ser una característica histórica de la forma de ser de los españoles.
Me fuí del tema, perdón, yo cago genial.
La foto es lo que me pedía el cuerpo tras decir que cagando somos una superpotencia. España, superpotencia, pues Casillas y demás.
ResponderEliminaruna cosa te voy a decir, yo la mierda no se la niego a nadie.
ResponderEliminarjajaja
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